Dejar todo, ganar y quedar en tablas

#Echagüe se vuelve a encontrar con #Boca con la obligación de no fallar para forzar un quinto duelo.
El técnico Ignacio Barsanti hizo su reflexión del triunfo en el tercer encuentro ante el Xeneize y adelantó sensaciones del choque de esta noche. “Tenemos que estar muy concentrados"

Es cierto que Echagüe ganó y que el ánimo se renovó. No obstante, la realidad indica que el elenco paranaense continúa con la soga al cuello y otra vez no tiene margen para el error.

En sí, la situación no cambió demasiado. Esta noche tiene que volver a triunfar, caso contrario perderá la categoría. Desde las 21, el AEC se vuelve a encontrar con Boca, en lo que será el cuarto punto

de la llave por la Permanencia, mano a mano que ahora lidera el Xeneize por 2 a 1.

Con el mismo objetivo de salir a escenario a imponer el ritmo y ganar para empardar el duelo, Echagüe tendrá esta noche otra prueba exigente, fundamentalmente de actitud y sacrificio.

Justamente, si de entrega, ganas y compromiso se trata, el elenco paranaense tuvo un cambio rotundo en el tercer partido respecto a lo sucedido en los primeros encuentros en La Bombonerita.

El técnico Ignacio Barsanti sabe que para ganar no solo hay que jugar mejor que el rival, sino también tener hambre de triunfo. En la previa de un juego decisivo, el DT de Echagüe charló con EL DIARIO y contó sensaciones de lo que pasó y lo que se viene.

- Estaba claro que para ganar no solo debían levantar la producción en el juego, sino que fundamentalmente en el carácter y la agresividad. Lo hicieron y fue decisivo para achicar.
- Nuestra deuda pendiente para el tercer partido era tener agresividad y mayor fervor, algo que no tuvimos en los dos primeros encuentros en Buenos Aires. Volvimos a tener el tono de juego que necesitábamos como para reaccionar ante una situación complicada. El equipo en ese sentido estuvo muy bien. Nos propusimos tener como primer objetivo el ser intensos. A veces la situación límite hace que los jugadores reaccionen así, bueno, el equipo se reactivó y pudo sacar adelante un partido muy difícil. Esta noche estamos en una situación similar, así que tenemos que volver a estar activos y muy concentrados.

- Más allá de la actitud también hubo una estrategia que se cumplió y sirvió para ganar. En este contexto, ¿qué es lo que rescatás?
-Desde ya que hubo un interesante trabajo. Nosotros sabíamos y sabemos que en defensa está la clave. En este tercer juego pudimos defender mucho mejor, fundamentalmente detener la transición que ellos proponen. El ir a buscarlos arriba y no dejar que los bases jueguen a cancha abierta fue un logro importante. Ellos se sienten cómodos en esa situación y supimos controlarlos mejor. Después, estuvimos bien en el pick and roll. Hicimos una buena cobertura en otras de las situaciones fuerte de ellos.

- La serie tuvo un arranque algo extraño, de hecho todos los partidos concluyeron por muy amplias diferencias. ¿Qué lectura hacés de lo sucedido?
- Me parece que los dos equipos supieron aprovechar las ventajas logradas y, fundamentalmente, de los momentos de cada partido como para quebrar al rival. Y una vez que eso sucedió, los finales terminaron abultados. Nosotros en Buenos Aires jugamos ocho cuartos y en dos de ellos los perdimos por goleo muy alto. Los otros seis fueron más parejos y equilibrados. Y acá pasó igual. Particularmente no esperaba que a Echagüe le sucediera lo que le pasó allá, y tampoco lo que a Boca le pasó este lunes en Paraná.

- ¿Y el cuarto punto cómo te lo imaginás?
- No me parece que se vuelva a dar un resultado tan abultado. Me parece que será más parejo, más equilibrado. Ellos van a entrar más agresivos, más fuerte. Entiendo que va ser mucho más cerrado que los anteriores.

- Se habla que si Echagüe logra superar este cuarto juego, en el quinto la presión la van a tener ellos. Igual, entiendo que es acelerar los procesos. El objetivo es este partido.
- Por supuesto. No me imagino el quinto partido porque tengo que ganar sí o sí el cuarto. Seguimos estando en una situación difícil y no nos queda otra que ganar. Esto es juego a juego.

- ¿Desde el juego creés que habrá varias modificaciones?
-Boca no trajo ninguna modificación. Al menos no la mostraron en el tercer punto. Nosotros intentaremos incorporar algunos detalles en ofensiva. Al margen de ello, entiendo que los dos buscarán aprovechar los momentos del partido. Tenemos que estar muy concentrados. Estos partidos no te permiten relajarte. Y desde ya que el apoyo de la gente será importante. Lo fue en el tercer partido y sé que acompañará en este juego.

Funes, inhabilitado
Oscar Funes, uno de los jugadores más importantes de Boca, fue inhabilitado por el honorable tribunal de disciplina de la Asociación de Clubes después de ser expulsado en el tercer partido de esta serie. En el partido del lunes el cordobés fue sancionado con una técnica y posteriormente expulsado por insultar a uno de los árbitros. Ayer se conoció la sanción. Según el número de Expediente 0127/2017 y basado en los Artículos 46, 155 C, 156 G (Descalificación. Insulto Arbitral), Funes fue inhabilitado por el duelo de esta noche. Boca tiene hasta hoy a las 14 para apelar a la sanción. Buscaba la habilitación y aceptaba pagar una multa. Por otra parte, aún es duda la presencia del griego Fotios Lampropoulos, quien no estuvo en el tercer encuentro por un corte en el dedo mayor y anular de la mano derecha.

Por goleada
Echagüe y Boca jugarán esta noche el cuarto punto de la serie por la Permanencia, encuentro que comenzará a las 21 con el arbitraje de Pablo Estévez, Fabricio Vito y Leandro Lezcano. Hasta aquí la llave está 2 a 1 para el Xeneize y lo llamativo es que los tres partidos jugados concluyeron con goleadas:
* Por 26 puntos el primer partido de la serie (110 a 84 para Boca).
* Por 25 puntos el segundo partido en Buenos Aires (90 a 65 para Boca).
* Por 26 puntos el tercer partido, ya en Paraná (92 a 66 para Echagüe).

Pablo Rochi, para El Diario
Foto: Bernardo Albisu

Echagüe le ganó a Boca se ilusiona con la salvación

El AEC descontó la serie y mañana hará cuarto partido.
En la serie por la Permanencia, el Atlético Echagüe Club derrotó anoche de local a Boca Juniors, por 92-66, y sigue con vida en la Liga al quedar 1 a 2 abajo en el cruce al mejor de cinco.

Por la permanencia en la Liga Nacional, el equipo paranaense derrotó al Xeneize con amplió dominó y puso la serie 1-2 y mañana desde las 21 buscará empatar la llave y definir en un quinto partido.

Echagüe tuvo unos de sus mejores inicios en esta temporada: combinó una buena defensa con un productivo ataque. La efectividad por parte del Negro se hizo presente y en este segmento impidió el trabajo de McDonald en la zona pintada con una férrea marca de Caracter. Es así que, el correr la cancha y encestar fueron determinantes para llevarse el cuarto por 19-12.

Boca salió con otra dinámica luego del primer descanso. Echagüe, en sus intervenciones cometió errores por eso, la visita descontó y Barsanti pidió tiempo muerto. La rotación del balón y el encontrar el hombre solo para un tiro cómodo fue el camino de Boca que le dio buenos dividendos y la improvisación fueron las armas de Echagüe que lo mantuvo en partido 29-28. Más allá de estas ideas en ataque durante este transcurso del juego, los equipos mantuvieron un común denominador: nada en defensa para irse al descanso 33 -32.

El Negró salió a toda máquina volvió a mostrarse sólido en defensa, recuperó, corrió y encestó. En esta combinación que le posibilitó sacar 11 (47- 36) puntos de ventaja influyó la tarea de Uranga y Caracter. Green, Zustovich y Buemo por dos, fueron las bombas consecutivas que sumaron en este camino ascendente para sacar la máxima de 18 (58-40) e irse al descanso por 62 a 46.

En la continuidad se observó una leve reacción de Boca, pero Echagüe puso el freno en el momento indicado y una volcada de Solano mandó al banco de suplentes. Los nervios se apoderaron de la visita y Echagüe se encaminó a la victoria ante un estadio repleto que disfrutó de este momento que se concretó por 92 a 66.

El Diario
Foto: Bernardo Albisu

El pasado y el presente se unen en un partido

Héctor Haile y la recordada serie de la temporada 1992/93 que dejó a los paranaenses en Primera.
El Chueco repasó aquel duelo entre Echagüe y Boca que el AEC ganó por 3 a 2, con dos simples suyos a segundos del final. “Se festejó como un título, con mucho desahogo”, confesó.

El juicio por el caso Calero se llevaba la gran atención, dejando en un segundo plano algunas cuestiones que por aquellos días de abril de 1993 igualmente preocupaban a Paraná como el derrumbe del muelle en el Puerto Nuevo, las intensas lluvias o la presencia de cenizas provenientes del Volcán Láscar, que llegaban desde Chile.

Pero en lo deportivo también había cierta tensión y sobre todo en el ambiente basquetbolistico, ya que el regreso de Echagüe a la Liga Nacional A volvía a estar en riesgo.

Luego de una buena campaña en la Liga B 1991/92, el cuarto puesto le terminó alcanzando AEC para retornar a Primera, ya que al bajarse Olimpo de Bahía Blanca, a los tres que subieron ese año -Santa Paula, Regatas SN y Banco Córdoba- se les sumaron los paranaenses, por mérito deportivo.

Con Charles Parker y Herb Blunt -reemplazó a Daron Hoges- como extranjeros, aquel elenco dirigido por Miguel Volcan Sánchez también tuvo a Miguel Zandomeni, Diego Mugherli, Martín Ipucha, Néstor Ibarra, Gustavo Roque Fernández, Daniel Ruhl, Claudio Chiappero, Ramiro Carulla, Luis Peralta y Héctor Haile, quien por primera vez se pondría la camiseta del conjunto entrerriano y tras dos años fuera del circuito -después de pasar por Peñarol jugó regionales con Deportivo Roca- vio con buenos ojos la chance de reintegrarse a la categoría.

“En esa época empezaban a aparecer los representantes y yo estaba en el margen de jugadores que todavía no se adaptaban a esa nueva era, y cuando me quise acordar todos los equipos estaban armados y quedé afuera”, contó el propio Chueco a EL DIARIO, quien sin pensarlo, por esas cosas del destino, seria protagonista principal en el objetivo de mantener la plaza.
Una floja Primera Fase condenó a Echagüe a la A2, donde mejoró y terminó tercero (8-6), lo que le deparó disputar los Octavos de Final frente a Sport Club de Cañada de Gómez.

Al perder 3-1, en el camino del AEC apareció Boca, al que enfrentó en otro mano a mano que tenía como premio para el ganador nada más y nada menos que la permanencia en la elite.
La novela de Blunt ya había comenzado y le costó caro a la dirigencia y compañía. El estadounidense abandonó su departamento y se fue a Capital Federal, antes del playoffs con Sport, reclamando un premio pendiente que debía cobrar por haber estado entre los tres primeros puestos en tres rubros diferentes de las estadísticas que publicaba la vieja revista Solo Básquet -en rebotes ofensivos y defensivos quedó segundo detrás de Dennis Still (Santa Paula) y fue primero en porcentaje en dobles (68%)-.
“Blunt tuvo un año tremendo, nos rindió mucho. Era flaquito, unos brazos larguísimos. Era zurdo, nada espectacular pero muy efectivo. Buen tiro, un interesante gancho, jugaba bien el uno contra uno”, recordó Haile sobre una de las figuras que había tenido el equipo junto a Charles Parker, quien “era una garantía”.

Esperando no sentir su ausencia como ante los cañadenses, Volcan pedía que busquen al foráneo. “Sabíamos de que el Negro andaba atrás de algo económico. Uno se va dando cuenta porque no iba a entrenar, o se demoraba porque estaba hablando con la dirigencia. Después terminó jugando en Quilmes, y no sé si habrá tenido algo que ver todo esto”, contó el ex base nacido en La Plata.

Blunt, al margen de esto, ya no había viajado a Neuquén por la segunda fase para enfrentar a Independiente, tampoco un a partido frente a Banco, en Córdoba, y no había jugado un tiempo contra Boca en la Fase Regular.

La gota que rebalsó el vaso se dio cuando Roberto Albisu, dirigente del AEC en aquel entonces, partió exclusivamente a Buenos Aires para destrabar el tema reuniéndose con el jugador y su agente, Joe Manley, para resolver el conflicto y viajar inmediatamente vía aérea a Paraná, cuestión que no se dio ya que Blunt nunca apareció por Aeroparque.

De esta manera, Echagüe tuvo que afrontar el playoffs contra Boca con lo que tenía, y respecto a este duelo, Haile explicó: “Había sido un año duro donde se mezclaban sensaciones agridulces. Por ejemplo, yo estaba muy feliz de haber recuperado mi lugar en la A, tener un buen nivel, jugar en Echagüe; pero por otro lado era muy tedioso el día a día, y cuando vos no tenés un clima bueno los momentos malos son tremendos y lo único que decís es que ‘se termine esto ya. Que pase lo que sea, pero ya’”.

“Si bien no estoy muy al tanto del plantel actual, igualmente me da la sensación, por lo poco que hablo con algunos, de que tienen un clima interno bueno, el grupo está bien más allá de la situación”, comentó el ex River; recordando lo que ocurría por aquel entonces en su Echagüe. “Nosotros teníamos muchos cortocircuitos con el entrenador en el día a día, siempre había un conflicto semanal con la dirigencia. Eran épocas totalmente distintas a lo que es ahora. Nosotros era perder, el lunes hablar con los dirigentes para ver si nos pagaban, el martes que el DT se peleaba con dos jugadores, el miércoles había que arreglar ese problema, y cuando te querías acordar ya llegaba el viernes de partido. Era muy tediosa la semana y es una etapa que consciente o inconscientemente la querés borrar, por eso quizás tengo muy pocos recuerdos de esa temporada. Imagino dormir poco, imagino nervios, porque la frase ‘jugar por el descenso no se lo deseo a nadie’ es así, es bravo, es mucho más difícil que jugar por el campeonato”.

UNA SERIE APASIONANTE
El AEC, con ventaja de localía, ganó el primer punto por un agónico 79 a 78, con un doble de Miguel Zandomeni a 1 segundo del final, luego de que Haile e Ibarra marraron dos oportunidades tras el rebote ofensivo.

“Ellos tenían a Alvin Heggs, un americano que jugaba de tres/cuatro y era muy bueno; a Julito Rodríguez, un goleador tremendo -segundo detrás de Pichi Campana en la historia de la LNB-; Ángel Cerisola, que era un base ordenador; y Rubén Scolari que hacía el trabajo sucio en defensa”, repasó el actual coach de la Primera División de Paracao (APB).

La perlita, Ronaldo Córdoba era el DT de ese Boca, el mismo entrenador que hoy tiene en su banco el club de La Ribera, quien había llegado al cargo cuando la dirigencia decidió cortar a Alberto Finguer por el mal inicio de temporada.

En el segundo choque, una verdadera cachetada significó el 89-85 con el que el Xeneize se llevó a Buenos Aires la chance de definir la llave. Cuando el Negro perdió a Mugherli y Ruhl por cinco faltas dio demasiadas ventajas y tanto Heggs como Scolari se apoderaron de la pintura.
La historia continuó en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CeNARD) y allí Boca aprovechó el bajón que su rival tuvo en el segundo tiempo para derrotarlo por un contundente 104 a 88. Echagüe se fue 53-50 arriba al descanso pero solo los 34 tantos de Parker no bastaron.

En el mismo escenario, los de Paraná, que a lo largo de la serie acompañaron su juego con mucha actitud, concretaron una férrea tarea defensiva que fue primordial para llevarse el cuarto punto y nuevamente la serie al Butta (96-87).

“En el quinto partido estaba llena la cancha, aunque era siempre así, en eso no nos podíamos quejar porque la gente nos apoyaba hasta en la calle. Era una época en la que ir a ver a Echagüe los viernes era el evento de la ciudad” aseguró Haile, actor principal de un final no apto para cardíacos.
“Había tenido cierres de jugada en movimiento pero no de estar solo, paradito frente a la línea, de que todo el trabajo de un año dependa de vos, tus compañeros, el DT, la gente, todos... Nunca me había pasado”.

Echagüe ganaba 84-82, Heggs fue a la línea, encestó el primer libre, marró el segundo y el rebote quedó para la visita. Scolari, con 11 segundos, convirtió un doble para pasar arriba (84-85). Haile tomó el bolo y en el ataque al canasto recibió la falta de Bradley. “Meto los dos, fuimos a presionar y erraron solos con el aro. Termina la pelota en mis manos y se acaba ahí. Frente al aro de calle 25 de Mayo, zurdazo al ángulo (risas). Se festejó como un título, con mucho desahogo. Insisto, eran otras épocas. Y no solo en Echagüe, también en otros clubes”. Boca luego vencería a Independiente de Neuquén (3-0) y también conservaría su plaza.

Santiago Reutemann, para El Diario

Solo importa ganar

#Echagüe visita desde las 21 a #Boca abriendo el duelo de la Permanencia.
El AEC, con plantel completo, buscará dar el primer paso en La Bombonerita, en la llave al mejor de cinco encuentros. El Xeneize contará con Carlos Delfino.

El futuro se resume en una serie. Y según como le vaya, se queda en Primera o vuelve al TNA. Es a todo o nada. No hay otra. Echagüe inicia esta noche su mano a mano más importante de la temporada. Se trata de la llave de playout que nadie quiere jugar pero que hay que afrontar, la cual reúne a los dos peores elencos del campeonato.

Después de una campaña muy pobre y con muchos problemas, el AEC se encontrará hoy con Boca para disputar el primer choque de los playoffs por la Permanencia, encuentro a disputarse en La Bombonerita, desde las 21 (Estevez-Smith-Britez).

Con desventaja deportiva, el conjunto entrerriano iniciará este duelo con la obligación de ganar de visitante, una situación algo complicada si se tiene en cuenta que en todo el torneo nunca pudo sonreír en cancha ajena. A pesar de ello, el plantel viajó con la ilusión de poder dar el golpe y lograr lo que hasta aquí no se alcanzó.

Lo positivo es que el técnico Ignacio Barsanti podrá contar con todos los jugadores. Sebastián Uranga se recuperó de su desgarro y el ala pivote estará a disposición para sumar minutos. Días atrás también lo había hecho Devin Green y Matías Nocedal, con diferentes contracturas.

Del otro lado estará Boca, conjunto con jugadores de mayor trayectoria pero que le cuesta jugar en equipo. Es toda una incógnita saber cómo se encuentra Carlos Delfino, su principal figura. El santafesino se puso a tono de su lesión en la rodilla que le demandó estar varias semanas fuera de las canchas. El no tener ritmo de competencia es lo que genera duda en cuanto a su presente. Igual, sabido es que su calidad aún en desventaja física se puede hacer notar.

Llegó el momento más caliente para Boca y para Echagüe. Dar el primer paso siempre es muy importante. Descomprime una presión que pocos pueden soportar. A la cancha, a ganar.

BOCA, BAJO LA LUPA
Echagüe afrontará esta serie con un par de tips que deberá tener en cuenta y respetar a rajatabla si pretende superar a su rival. ¿Cómo juega Boca? ¿Cuáles son sus sistemas en ofensiva? ¿Dónde busca sacar ventajas? ¿Qué deberá hacer el AEC para limitar sus virtudes?

Está claro que para ganar en La Bombonerita la defensa será determinante. Si Echagüe no defiende correctamente será imposible festejar.
Boca tiene diferentes jugadas en ataque, pero para definir repite mucho la misma acción. Utiliza la cortina directa a la bola (para Carlos Delfino, Nicolás Gianella o Lucas Pérez) como principal argumento. Romper este ejercicio será un paso elemental.

Las cortinas a la bola son casi siempre del pivote (Cristian Amicucci o Will McDonald). Automáticamente que ello ocurre, ese jugador cae al poste bajo. Entonces, o define la acción Delfino, Gianell o Pérez, o la bola termina abajo con el grande.
¿Dónde estará la clave para Echagüe? Primero saber controlar el pick para que el perimetral no tome protagonismo, después negar el pase al pivote en la zona pintada para que no haya continuidad del sistema.

Cortina a la bola y definición del pivote. Ahí apunta Boca para lastimar al rival, y es ahí donde Echagüe deberá enfocar su defensa para que ello no ocurra.

DE A UNO
Más allá de cualquier sistema, Boca tiene una gran ventaja: Carlos Delfino. La calidad del santafesino puede romper el molde. Si él está inspirado, no hay scouting que valga. Después, el resto tienen capacidades que pueden ser controladas. Quien más decisiones toma en ataque después de Delfino es Nico Gianella. Base, zurdo y rápido de piernas. Si la cortina es hacia él, el defensor del AEC debe romper por adentro para cerrar la penetración. Que Gianella ejecute desde larga distancia antes de que vaya hacia el aro. Esa es la mejor opción.
Lucas Pérez, por su parte, es un base diferente. Prefiere el tiro largo o el freno y tiro antes que la bandeja profunda. Baeza y Zustovich, los defensores de ambos, deberán entender estas diferencias como para intentar controlarlos. Adentro, Amicucci y McDonald, también tienen características diferentes. Amicucci siempre busca definir para la izquierda, su mano fuerte. Negarle esa opción. McDonald es derecho y más completo. Puede definir de frente o de espaldas. Barroso o Caracter tendrán que trabajar intenso. Desde ya, prohibido descuidar al griego Fotios Lampropoulos, Oscar Funes, Eduardo Vassirani y Lucas Gargallo.

DEBILIDADES
El Xeneize, de hecho el vértigo y el juego de transición le molestan y mucho. Es un plantel de piernas pesadas y lento en el retroceso. Ante ello, Echagüe debe apostar a correr en transición. Si el AEC propone un juego intenso pondrá a su rival en un lugar incómodo. Boca tiene aptitudes para atacar pero muchos problemas para volver. Hacer un trámite cansino no es lo adecuado. Beneficiará al adversario. Defender fuerte y correr debe ser el propósito.

Pablo Rochi, para El Diario

Dio señales de esperanza

#Echagüe hizo un buen partido en Córdoba pero volvió a perder.
El AEC, sin tres de sus fichas mayores disponibles, tuvo a maltraer a #Atenas pero falló en el cierre y cayó 89 a 84. No obstante, la imagen que dejó fue positiva pensando en el playoff por la Permanencia ante #Boca Juniors.

Es cierto que hace 13 partidos que no gana y que de visitante sigue sin hacerlo. Pero también es cierto que cuando quiere saca a relucir ciertas ganas y actitudes que demuestran que si se lo propone está para cumplir su meta: mantener la plaza.

Echagüe volvió a perder anoche por la Liga Nacional de Básquetbol. Esta vez, fue 89 a 84 frente a un Atenas al que tuvo a maltraer en Córdoba y que recién en los instantes finales pudo sentenciar el triunfo.

El Negro, que una vez más no pudo contar con Devin Green, Josimar Ayarza y Sebastián Uranga, todos recuperándose de diferentes lesiones, peleo con uñas y dientes ante El Griego -no tuvo a Diego Logrippo- buscando sumar confianza pensando en el playoff por la Permanencia ante Boca. Ayer, a pesar de volver a caer, igualmente lo hizo.

Y de entrada nomás con Derrik Caracter y Gelvis Solano se puso arriba. A pesar de su juego individualista, el AEC hizo negocio para quedar 21-13, diferencia que no pudo mantener ya que la tarea de Pete Mickeal también se hizo sentir.

Los locales continuaron beneficiándose con segundas opciones. Eso sí, los entrerrianos jugaron en equipo, con Solano, Zustovich, Baeza, Sucky y Barroso, recuperaron terreno (23-29).

La falta de intensidad del Griego le permitió a la visita dominar el juego. Además, cada vez que pudo correr hizo daño (38-39).
En un primer tiempo muy equilibrado, un bombazo de Stucky llevó al Negro en ganancia a los vestuarios (44-43) con 19 puntos y 4 asistencias de Solano -14 y 3 rebotes para Mickeal en Atenas-.

Tras el descanso largo, los cordobeses fueron puro egoísmo. Por su parte, Echagüe, además de Solano, tuvo a un inmenso Stucky. Así, los paranaenses supieron explotar los errores de su rival y pegar en los momentos justos.

Pero el quiebre llegaría en los últimos 10 minutos. Al margen de que Chiarini abusó del tiro externo, Atenas entró a los últimos 5 minutos 79-73 en ganancia, con un Lisando Rasio clave para destrabar el juego.

Sin embargo, los de Arduh, que llegaron a sacar 8 (81-73), no fueron inteligentes para cerrarlo.
AEC presionó, recuperó pelotas y con muchas ganas, como en toda la noche, llegó a un final abierto (85-82 a 28 segundos) en el que Atenas lo definió a su favor con algo de fortuna, convirtiendo un 2/4 en libres en los últimos segundos (Lábaque), y un Rasio que terminó siendo figura.

El viernes, Echagüe terminará la Fase Regular contra Libertad de Sunchales, que anoche cayó ante Quilmes, en Mar del Plata, por 75 a 72.
Además, en Caballito, Quimsa venció 108-104 a Ferro, en suplementario (95).

El Diario

Solo hizo lo que pudo

#Echagüe, con tres bajas, volvió a perder como visitante ante #Instituto.
Sumó su 26ª caída en la ruta, donde sigue sin poder festejar en la temporada, y ahora acumula 12 derrotas en forma consecutiva. Las ausencias de Green, Ayarza y Uranga por lesión.

Ensayar sistemas, probar jugadas, repartir minutos. Echagüe sabe hace rato que el playoff por la Permanencia es su destino y en ello piensa, en llegar de la mejor manera al duelo que comenzará el próximo 24 de mayo ante Boca y que dejará al ganador de la serie en la Liga Nacional de Básquetbol.

Pero el AEC también es conciente que todavía no ha podido ganar como visitante, y bien podría ser una cuota de motivación y “alivio”

hacerlo antes del mano a mano con el Xeneize, más teniendo en cuenta que la ventaja de la localía la tendrá su rival.
Y anoche el Negro volvió a fallar. En realidad hizo lo que pudo en su presentación en Córdoba ante Instituto -no tuvo a San Clancy-, choque en el que no contó ni con Devin Green, ni con Josimar Ayarza, ni con Sebastián Uranga, ausentes por diferentes lesiones y que, obviamente, apuestan a llegar a “la final” por la plaza en la A.

Si bien comenzó con comprometido en defensa y efectivo en sus ataques, lo que lo llevó a ponerse 12-4, desde el perímetro Instituto lastimó y se metió en juego (13-14). A partir de allí, la paridad fue una constante, al menos hasta que la falta de gol del AEC se hizo más pronunciada (22-18).
Mientras las ofensivas continuaron dependiendo de Solano en la visita, lo de DeGroat fue clave para La Gloria. Junto a él, Darren Phillip también se hizo sentir para que su equipo llegue cómodo al descanso largo (46-31).

Los locales, necesitados del triunfo para obtener la mejor ubicación posible para los Cuartos de Final de la Conferencia Norte, sacaron una máxima de 25 (71-46) en el tercer cuarto y en el último, a pesar de que los entrerrianos llegaron a descontarla (78-66 a 3.49 minutos del final) nada hizo cambiar el destino.

Además de Solano, Franco Barroso (17 puntos y 8 rebotes) y Emilio Stucky (11 y 6) fueron los de mejores números en un Echagüe que terminó en cancha con los juveniles Manuel Robles y Nicolás Marangoni, este último, haciendo su debut en la LNB.
Mañana, a las 21.30, el AEC visitará a Atenas, que anoche goleó 126-91 a Regatas (C) con 41 puntos y 8 asistencias de Bruno Lábaque.

El Diario

En Boca de todos

#Echagüe tiene rival confirmado para la serie por la Permanencia.
El Xeneize será el adversario del AEC en el mano a mano para mantener la plaza en Primera, duelo que comenzará el 24 de mayo.

Parte de la comisión directiva del Atlético Echagüe Club se reunió con el cuerpo técnico y el plantel profesional que participa de la temporada 2016/17 de la Liga Nacional de Básquetbol con la intención de analizar, de manera conjunta, la situación actual del equipo teniendo en cuenta la cercanía del playoff por la Permanencia, instancia para la cual ya tiene confirmado rival: Boca Juniors.

En el Salón de Usos Múltiples de la entidad, en el encuentro cada uno de los participantes pudo volcar su opinión realizando una importante autocrítica, tanto individual como colectiva, por parte de los distintos estamentos.
Sobre el cierre del cónclave, las partes se comprometieron a potenciar al máximo sus esfuerzos para dejar al AEC en la máxima categoría del básquet argentino.

Pensando en la última gira de la Fase Regular en la que enfrentará a Instituto y Atenas en Córdoba el domingo y martes, respectivamente (luego visitará a Libertad de Sunchales), el equipo de Ignacio Barsanti continuó ayer con los trabajos en doble turno y hoy solo tendrá un ensayo.
Mañana, la delegación partirá rumbo a La Docta y un día después enfrentará en el estadio Ángel Sandrín a La Gloria, desde las 21, con el arbitraje de Roberto Smith y Javier Mendoza.

Para éste y el duelo con el Griego, ausentes estarán Sebastián Uranga y Josimar Ayarza, quienes se retiraron lesionados del último partido con Hispano Americano -derrota por 88 a 66 en Paraná- y no se están entrenando.
Otro que no practicó fue Devin Green, aunque su presencia en la capital cordobesa no corre riesgo. El estadounidense ya venía con sus isquiotibiales cargados antes del último juego contra los santacruceños pero igual pidió ingresar, por eso está siendo resguardado.

A TOMAR NOTA
El Departamento de Competencias y la Secretaría Técnica de la Asociación de Clubes de Básquetbol definieron las fechas de los playoffs de la etapa de Reclasificación y Permanencia de La Liga Nacional. En este sentido, los puntos de Cuartos de Final de Conferencias se jugarán el lunes 22, miércoles 24, sábado 27, lunes 29 de mayo y jueves 1 de junio, estos dos últimos, de ser necesarios; mientras que para el miércoles 24, viernes 26, lunes 29 y miércoles 31 de mayo, como así también el sábado 3 de junio, están pautados los juegos entre Boca y Echagüe por la Permanencia.

ATENTO AEC
Instituto (29-24), quinto en la división Norte, se enfrentará hoy a Regatas Corrientes (32-20), tercero en la misma sección, en uno de los encuentros que le dará continuidad a la Segunda Fase.
El partido se jugará desde las 21, en el gimnasio Ángel Sandrín. Los árbitros serán Alejandro Chiti y Mario Aluz.

Los dos conjuntos ya están clasificados para los playoffs de postemporada y lo único que se necesitan definir es la posición final que ocuparán.
La Gloria no sabe si contará con el alero norteamericano Rodney Green, quien está con una ligera molestia muscular y fue preservado en el duelo con Bahía Basket (82-97).

En tanto, Regatas volverá a tener en sus filas al alero Lorenzo Ottani, quien sustituirá al estadounidense Kejuan Johnson.
Además, a partir de las 22, Olímpico de La Banda (30-24), cuarto en la Conferencia Norte, con el base Maximiliano Stanic en duda (fascitis plantar), recibirá a Bahía Basket (29-23), tercero en la zona Sur, con Fernando Sampietro y Julio Dinamarca como jueces. Los dos equipos también tienen asegurados sus respectivos pasaportes a los playoffs de clasificación.

El Diario.
Foto: Bernardo Albisu

Un gran llamado de atención

#Echagüe perdió anoche ante #Hispano Americano de Río Gallegos.
El AEC mostró un pobre rendimiento, distinto al de sus últimas presentaciones, y lo pagó con la 11ª derrota consecutiva frente a un posible rival por la Permanencia. Fue 88 a 66 para los del sur.

Era el partido en el que menos podía fallar. Un posible rival por la Permanencia, un equipo, en teoría, de un nivel “similar”. Una gran ocasión coronar el crecimiento expresado ante Boca, Ferro y Argentino cortando la mala racha de 10 caídas en fila.

Pero los errores fueron graves, se falló mucho en defensa, ni hablar en ataque. Hasta la actitud dejó preocupados a quienes fueron anoche al estadio Luis Butta con otras expectativas, en la última presentación como local en la Fase Regular.
Echagüe, sin dudas, dio un paso atrás en su preparación de cara al playoff para mantener la categoría. Un duro golpe, durísimo. Encima con equipo completo, ya que retornaron sus máximas figuras, Gelvis Solano y Derrick Caracter, que como el resto hizo poco y nada para evitar el 88 a 66 con el que Hispano Americano hizo un “negoción” pensando en su meta de quedarse una temporada más en la Liga Nacional de Básquetbol, algo para lo que el AEC deberá trabajar multiplicando esfuerzos. Es cierto, lo bueno es que esto pase ahora y no en plena serie. Pero el próximo domingo, ante Instituto, tendrá que demostrar que lo de ayer fue solo una mala noche.

EL PARTIDO
Las dos defensas agresivas se sintieron y a ambos les costó encestar en el inicio. Echagüe apostó mucho a jugar la bola a Derrick Caracter, como única opción, pero la custodia de Alejandro Zilli sobre él lo privó de puntos ya que el AEC careció de un plan B.
Hispano fue creciendo y con más variantes sacó 7 de distancia (2-9). A falta de 4.56 minutos para cerrar el primer cuarto, el 1/3 en cancha y las 4 pérdidas del dueño de casa dejaron en evidencia los problemas en ataque.
Ignacio Barsanti metió mano en su banco pero tampoco encontró allí soluciones. Echagüe no solo continuó sin ideas arriba sino que en defensa falló en el bloquéo y lo pagó caro (2-15).
De a poco, tímidamente, un par de conversiones desde atrás de los 6.75 metros encendieron a un AEC apagado, que cambió su actitud y se acomodó (12-19).

Los paranaenses se fueron al mini descanso con solo 9 intentos de cancha (5/9) contra 18 de su rival (9/18).
Gelvis Solano y Carlos Buemo siguieron siendo las cartas de gol del Negro, necesarias para contrarrestar a un activo Larry O’Bannon (20-25). Y necesario también fue que el aro se abra con otras opciones, como por ejemplo cuando con triples no solo de Buemo, sino también de Joaquín Baeza y Sebastián Uranga, el local continuó achicando la brecha (29-30).

Pero depender tanto del lanzamiento externo empezó a sentirse, y cuando la bola no entró los santacruceños sacaron provecho (30-37).
Otra vez dormido en defensa, otra vez los mismos errores a la hora de capturar el rebote, otra vez perdido en ataque. Tras el descanso largo la apatía de Echagüe le dio la chance a Hispano Americano de ampliar la diferencia. Un parcial de 15 a 2 que puso la historia 32 a 52, en los primeros 5 minutos del tercer cuarto.
Una vez más, en el tiro desde el perímetro Echagüe buscó algo de aire, pero solo ésto no le bastó, y los de Adrián Capelli entendieron que la posibilidad de dar el golpe de nocaut con mucha antelación era posible, y de hecho lo hicieron.

Santiago Reutemann, para El Diario
Foto: Bernardo Albisu