Franco Barroso tiene paperas y es otra baja para Echagüe.
El pivote estará unos 10 días en reposo y se perderá el próximo juego ante Quimsa de Santiago del Estero. “Me quiero morir, justo ahora me vengo a agarrar esto”, contó el marplatense.
Me quiero morir, justo ahora me vengo a agarrar esto”. La frase es de Franco Barroso, y no es para menos. Es que ya es algo increíble lo que le está pasando a Echagüe en esta temporada 2016/17 de la Liga Nacional de Básquetbol.
Ayer desde el propio club se confirmó que el pivote tiene paperas, por lo que deberá estar unos 10 días aislado, guardando reposo. “Son unos diez días en cama nomás y aburrirme es inevitable. Aunque vea películas o algo en la tele ya no sé que hacer”, contó entre risas el marplatense, quien solo espera recuperarse “lo antes posible”.
Es cierto que el AEC atraviesa un pésimo momento en su campaña. De hecho, el último viernes, en Sunchales, cosechó ante Libertad su 13º caída consecutiva (84-74), igualando así la peor racha de su historia en la categoría y quedando último en la Conferencia Norte. No obstante, más allá de las derrotas y la posición en la tabla, estas cuestiones complican las intensiones de salir de esta mala racha.
“Sí, es increíble que siempre algo pasa. Si no es lesión es enfermedad, y por eso la mayoría de los partidos no contamos con el equipo completo. No digo que ese sea el motivo de la mala racha, pero es algo que preocupa y complica”.
Días atrás, EL DIARIO repasaba este panorama adverso que está teniendo el Negro en su retorno a la elite, el cual comenzó con el esguince de tobillo de Dallin Bachynski por los primeros tres partidos; siguió con el desgarro de Sebastián Uranga que lo dejó afuera por dos; más tarde también un cuadro de parotiditis no le permitió a Brandon Davis estar en la primera gira por Corrientes y Formosa; entre medio la contractura en el gemelo que siempre aquejó a Kodi Augustus, hoy en día fuera del plantel; la fractura del base juvenil Eugenio Zustovich en uno de sus dedos de la mano izquierda de la cual se sigue recuperando; el fastidioso dolor de muela que derivó en que Xavier Keeling, reemplazante de Augustus, deba ser atendido de urgencia a pocas horas de jugar con Instituto, en Córdoba; y el edema óseo que padece Uranga en su rodilla izquierda, por el que todavía le quedan cinco semanas más antes del regreso y que concluyó en la llegaba temporal de Axel Weigand.
Igualmente, vale recordar que Barroso, en la gira por La Docta, solo pudo ingresar ante Atenas ya que con La Gloria un fuerte estado gripal lo obligó a quedarse en el hotel.
-Después de la vuelta de Córdoba, y más allá de que jugaste en Sunchales, ¿Pensaste en algún momento que lo que tenías era más que una gripe?
-Y, antes de ir a jugar a con Libertad estuve con fiebre y se veía que tenía hinchada un poco la zona de la garganta. Consultando con la doctora -Paola Bupo, médica del plantel- parecía una angina pero sin placas, y estaba apto para jugar. Cuando volvimos de Sunchales, al otro día seguía igual y la hinchazón empezó a subir. Volví a ver a la doctora y ahí ya me dijo que esto era una papera. Esta mañana (por ayer) me saqué sangre pero es seguro que tengo eso.
-En cuanto a lo deportivo, tras tocar fondo en Santiago del Estero (derrotas ante Quimsa y Olímpico por 42 y 40 puntos, respectivamente), si bien no pueden ganar cambió un poco el equipo y estuvieron más cerca del triunfo.
-Si, después de esa gira de Santiago, donde realmente nos fue muy mal, creo que los partidos siguientes mejoramos y estuvimos siempre en juego. En la gira de Córdoba, en Sunchales y acá (Estudiantes), siempre estuvimos en partido y si bien no pudimos ganar competimos hasta el final de igual a igual. Tenemos que cortar esta mala racha.
-¿Los cambios de fichas le dieron otro aire al equipo?
-El entrenador los hace buscando eso y están respondiendo bien. Gelvis Solano (cambio por Lisandro Ruiz Moreno) tuvo buenos partidos. Ahora están la llegadas de Axel (Weigand) y Jonathan (Araujo, vino por Bachynski), que están hace muy poco pero con estos días que hay hasta el próximo partido tendrán tiempo para que se vayan adaptando.
PENSANDO EN QUIMSA.
Echagüe comenzó el domingo a trabajar de cara al duelo con La Fusión que se jugará el 20 de noviembre, a las 21, en el estadio Luis Butta.
Si bien en los planes del DT Daniel Maffei la idea era tener a Barroso, los 9 días entre el último partido y el que se viene igualmente sirven de mucho para que las nuevas caras (Araujo y Weigand) se familiaricen con su nuevo equipo.
Santiago Reutemann, para El Diario.
Foto: Bernardo Albisu
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