El pivote nació en Rosarino en 1982 mide 2,10 metros y tiene un extensa carrera. Ahora está en Echagüe de Paraná y es el capitán.
El pivote nació en Rosarino en 1982 mide 2,10 metros y tiene un extensa carrera. En la Liga Nacional jugó en Libertad de Sunchales, Regatas de San Nicolás, La Unión de Formosa, Belgrano San Nicolás, Obras Sanitarias, Unión Progresista. Participó de la Liga Sudamericana con Libertad y Obras. Pasó por España, goleador en Chile, gran paso por Brasil con la camiseta de Sport Recife con un promedio de 25 puntos en la Súper Liga. Actualmente es uno de los jugadores más desequilibrantes del TNA. Con la camiseta de Echagüe de Paraná tiene un promedio 18,2 puntos por partido.
—¿Por qué el básquet?
—Primero por la altura. Después porque me gustó mucho y a medida que pasaron los años tenés más pasión.
|—¿Un hobby?
—Me gusta leer mucho historia. De todo. Pero siempre leo sobre la primera Guerra y la Segunda Mundial y miro documentales. Busco comentarios y sigo todo lo relacionado.
—¿Cuál fue tu primer sueldo?
—Fueron 150 pesos en el año 1999 en Ferro. Me alcanzaba para una Pepitos y una lata de pepsi por día. Todas las tarde compraba eso y me alcanzaba para eso al mes.
—¿Y el primer sueldo importante?
—En Libertad de Sunchales. No me acuerdo cuánto, pero habrán sido 1.200 pesos, que a lo 18 años era mucho.
—¿Cuál es la mejor cancha para jugar?
—La de Sport de Cañada. En condiciones te puedo decir la de Unicaja de Málaga, pero para jugar y llena, la de Sport. Es chica y el ambiente es el mejor.
—¿Y el mejor jugador que enfrentaste?
—Marc Gasol. Fue en Liga de vernano ACB. Éramos muy jóvenes y era un grande, en potencia y en juego.
—¿Un triunfo?
—Reponerme de mi lesión de ligamentos en 2006. Ese fue un gran triunfo.
—¿Fue el golpe más difícil de tu carrera?
—Sí, y de la vida. Fue el último partido de Liga y en el club no se hicieron cargo de mí. Fue en La Unión de Formosa. Perdí un año, gasté todos mis ahorros en operarme. Tuve la suerte de volver a jugar porque Patota Dastugue me llevó a Belgrano. No sabía si iba a seguir jugando y si iba a conseguir club. Imaginate un año parado sin pertenecer a ningún club, es un tipo que desaparece.
—¿Un jugador que admiraste como compañero de equipo?
— El Caco Colla. Por ejemplo de trabajo y humildad. Siempre metía la daga en el momento final.
—¿Un técnico?
—Seba (Uranga). Logré una conexión muy grande con él. Creo que porque es la primera vez que tengo un técnico que es pivote y me siento identificado y eso me ayuda mucho.
—¿Un dirigente?
—Me quedo con la dirigencia chilena. Son muy organizados y respetuosos. Excelente.
—¿Un lugar en el mundo que hayas conocido?
—Mi lugar es Rosario. Pero te digo Barcelona.
—¿Un lugar de Paraná?
—El Parque Urquiza. Voy con el perro a disfrutarlo y es muy lindo.
—¿Un lugar para vivir?
—Rosario.
—¿Ventajas y desventajas de ser alto?
—Ventajas a nivel deportivo y de seguridad. Sentirse seguro con uno mismo es muy bueno. Obviamente me dio un modo de vida que no hubiera tenido si no fuera por eso. Y desventajas: incomodidades en un mundo que no es para nosotros. Pero hace 30 años que esquivo cosas y ya no me llevo nada por delante.
—¿Lo sufriste de chico?
—Y un poco. Antes de los 14 años no tenía problemas, pero me sentía grande. Pero cuando empezaba la etapa más difícil que es la adolescencia empecé en un ambiente como es el básquet y te encontrás con un montón de gente que te dice ojalá fuera como vos o más alto y eso me dio confianza.
—¿Te agarraste a piñas?
—Sí, muchas. Soy de bastante carácter, pero bueno, fue hace mucho.
—¿Tomás dimensión de que tenés más de dos metros a la hora de pelear?
—El tema es que no busco. Entonces es el que me está buscando el que toma dimensión.
—¿Te arrepentís de algo?
—De hablar más rápido de lo que pienso. Muchas veces me pasa.
—¿Y eso te trae problemas?
—Sí, claro.
—¿Una comida?
—El asado.
—¿Una bebida?
—El jugo de naranja exprimido.
—¿Qué música te gusta?
—Depeche Mode.
—¿Una película?
—Matrix.
—¿Te gusta el cine?
—Sí, cuando estamos libres con mi novia vamos al cine. Y cuando paramos en algún lado con el básquet miro on line.
—¿Una mujer?
—Yanina, mi mujer.
—¿Qué cosas te sacan?
—La falsedad, la injusticia, la mentira. Pero en la vida cotidiana. Y a veces me cuesta entender que sea parte del juego.
—¿Una deuda pendiente?
—Extraño pasar más tiempo con mis amigos de Rosario. Pero se va a cumplir cuando me quede en mi casa.
—¿Qué te hubiese gustado ser de no haber sido jugador?
—No sé qué. Pero sé que hubiese intentado estudiar un nivel superior. No me hubiese quedado en casa.
—¿Qué te gustaría leer en los diarios de mañana?
—Que Echagüe ascendió. Tenemos un grupo que se lo merece y hoy pienso eso.
UNO.-
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