martes, 7 de febrero de 2017

Otra imagen, mismo final

#Echagüe no pudo con #LaUnión de Formosa y cayó 94-89 en el estadio Luis Butta.
El AEC cambió su cara respecto a la actuación del sábado con Quilmes, la peleó hasta el cierre pero falló y volvió a quedarse con las manos vacías.


Ganar y cambiar su imagen respecto a la caída del sábado ante Quilmes (62-90) era el combo perfecto para Echagüe anoche frente a La Unión de Formosa, en una nueva presentación en el estadio Luis Butta por la Liga Nacional de Básquetbol. Sin embargo, si bien pudo mostrar un mejor rendimiento, en el cierre del juego falló y volvió a sumar una nueva derrota en esta temporada 2016/17. Esta vez, fue 94 a 89, en un desenlace dramático en el que la experiencia de su rival terminó pesando.
Ivan Najnudel se la jugó por Emilio Stucky de entrada -por Derrick Carácter- y el salteño no le falló cumpliendo un buen trabajo defensivo sobre Torin Francis y tomando reiteradas segundas opciones (3) a las que su equipo no les sacó demasiado el jugo.
Además, la vuelta de Josimar Ayarza tras la lesión de su rodilla fue un hecho, y el panameño también fue clave en las ofensivas.
Los internos del AEC se llevaron todo el protagonismo y con 7 y 8 tantos, respectivamente, pusieron al Negro 15-9 arriba.
Siempre con La Unión cerca, Echagüe dominó el tanteador pero bajó su rendimiento cuando Stucky, ya con tres faltas personales, se fue al banco (15-11).
Los paranaenses entraron en su clásico bache para encestar, un problema de toda su campaña, con un Brandon Davis, Matías Nocedal y Gelvis Solano totalmente erráticos (0/4, 0/5 y 0/3 en cancha, correspondientemente), situación que los de Guillermo Narvarte no dejaron pasar como para con un parcial de 9-2 terminar en ganancia por 18 a 17 los primeros 10 minutos del partido.
Con Caracter por primera vez en la cancha, en el inicio del segundo cuarto nada cambió y Echagüe siguió empeorando sus números. Lo bueno para el AEC, la visita no supo atesorar mejor la chance y el Negro despertó, y de estar 18-24 abajo pasó a dominar 27 a 24, con triple de Nocedal incluido y una buena mano desde la línea. El encuentro continuó parejo y de una vez por todas Solano dijo presente en el goleo, con una mayor confianza que ubicó a su equipo 34-27 arriba, a 4.21 minutos del entretiempo.
El dominicano fue el dueño de las anotaciones paranaenses, con 10 seguidas, las que le cambiaron la cara un AEC que volvió a ingresar en un pozo y a falta de 35 segundos del final quedó nuevamente en abajo (36-39), antes de que Ayarza rompa la mala racha (38-39).
Los yerros estuvieron a la orden del día en la primera mitad y así lo reflejaron los números, con un 38% de eficacia en cancha para Echagüe contra 41% de La Unión, que a diferencia de los entrerrianos repartió mejor sus tantos.
Después de 5 minutos muy parejos, en los que Stucky, Ayarza y Solano volvieron a destacarse (49-49), el semifinalista de la Liga de las Américas lastimó en la segunda parte del tercer cuarto, cada vez que rotó la pelota, como así también cuando lo dejaron correr, y beneficiándose con otro momento de sequía de Echagüe se escapó (49-56).
Cuando más lo necesitaba, el AEC despertó y un bombazo anímico de Joaquín Baeza le permitió llegar con otro aliento al último período (61-63), ya sin Stucky, afuera por faltas.
La energía positiva el Negro la trasladó al inicio del cuarto cuarto, con Solano al mando de las ofensivas, con Uranga cumpliendo después de errar una bandeja solo con el aro, con Baeza oportuno con su mano desde el perímetro (74-69).
Igualmente, quebrar el juego fue la tarea más difícil que tuvo Echagüe ya que La Unión, poniendo en evidencia los problemas a la hora del balance defensivo de su rival, dejó nuevamente todo igualado en 75.
Se veía venir un cierre dramático y así fue. Nocedal fue protagonista en el final (87-88), pero el venezolano José Vargas y Eduardo Gamboa también lo fueron en La Unión, que sacando a relucir su plantel más experimentado se llevó un gran premio de Paraná.
A falta de 5.2 segundos para la chicharra, el ingresó por primera vez en la noche de Carlos Buemo no fue del agrado del público que disparó insultos contra el DT Najnudel entendiendo que el U21 debería haber ingresado antes, sobre todo teniendo en cuenta la pobre noche de Davis (1/8 en cancha).

Santiago Reutemann, para El Diario
Foto: El Diario

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